Diario de Londres II: Llegar y beber el santo
[...] Y si queréis vamos a un pub a ver algún partido y tomar unas cervezas. Así terminaba el mensaje que mi amigo me había dejado indicándome donde vernos el día de nuestra llegada. Como decíamos en el anterior post, llegabamos entre media hora y cuarenta minutos tarde, algo normal en nosotros por un lado y por otro nada mal para dos paletos en la City. El caso es que, años después, allí estaba mi amigo, sentado en un banco de la estación de metro de Canada Waters, esperandonos con su paciente y estoica manera griega de siempre. Abrazos, besos risas y empujones. Tras Un Paseo hasta su casa donde amablemente nos hospedaba y una charla para ponernos al día y meternos el uno con el otro ya estabamos de camino a un pub donde poder comer algo y tomar unas cervezas. Mr.S., le dije al griego, a mi el fútbol me da igual, yo soy más de cerveza y conversa, con que tengan cask ale y haya una camarera guapa y algunas chicas más me vale. Galguera, a pesar de ser entrenador del llamado deporte rey( viva la república del baloncesto!!!! jejejejeje) apoyaba la cuestión.
Vamos guianos po'l istintu Guaje, po'l istintu. Esta Otra frase gilipollas del viaje se refería a que no pensabamos seguir guías, ni páginas webs ni nada-salvo un par de ellas que comentaremos en su momento. Fue esto lo que me llevo a tomar mi primera pinta de Proper Job , de la Cervecera St. Austell de Cornualles, la guest del lugar. Y es que mi instinto no se puede reprimir a la frase Powerfully Hopped*. Sin meterse en pesadas notas de cata diré que cumplía a la perfección lo que andaba buscando. Poco tenor alcohólico, temperatura ambiente, sabores y olores marcados a cereales y yerbas y un amargor que se prolonga desde el aroma hasta el retrogusto y que te hace querer otro trago. Tuvieron que ser dos, claro. Galguera por su parte optaba por la cask de la casa y tomaba un par de Greene King IPA que no le estaban dejando nada satisfecho, cosa que me empezaba a mosquear aunque no me quise meter en disquisiciones, entregado como estaba a la conversación y al disfrute de la de Cornualles.
Gilipollas que sentido tiene un blog si no vas a poner lo malo, la gente va a pensar que no tienes criterium. Son las palabras con las que amigo me rebatía la idea de no hacer críticas de las cosas que no me gustan. Y es que de este pub, no me gustó nada que a las putas 20.45 de la tarde( no de la noche!!!!!) el camarero nos dijera que la cocina estaba muy ocupada y que no servían ya más cenas. Miré a mi alrededor, incrédulo, observando que sólo había 3 mesas con gente cenando-con 3 personas cada una- y dos tipos más en la barra comiendo algo mientras veían dar patadas a un balón. ¿Eso es abarrotado para un aforo de 50 personas en comedor?¿Sóis españoles?¿paso a echaros una mano? todo eso fue lo que rápidamente pasó por mi cabeza y a punto estuvo de salir por mi boca. Sin embargo sólo sonreí fingiendo una decepción y les di las gracias educadamente, mientras ya en español me cagaba en todo, ¿En qué puto bar estamos?. Decepcionante, no cabe duda.

Nos sentamos al lado de la chimenea-por suerte apagada, y pedimos la primera pinta. Greene King IPA en Cask. A veces creo que las cerveceras usan los estílos como mera arma de mercadotecnia. Para mi gusto le falta sabor, le falta cuerpo, le falta amargor y le falta todo como IPA. Llegaron la salchicha de Cumberland y el Pollo Cajún y pedimos otra para ver si con la comida mejoraba. Nada, seguíamos igual o casi peor.Nos parecía Total y decepcionantemente insulsa para una cask ale.
Una vez cenados ¿Quién podría resistirse en una noche anormalmente calida para el Octubre londinense a salir a la terraza a tomar una pinta y fumar un puro? Eso fue lo que hicimos. El resto de las cask ales eran del Portfolio de Greene King y nos decidimos por tomar una pinta de Abbot Ale Reserve, que casi nos mata 6,6% De alcohol todo malta poderosa, todo fruta muy madura, y un final a Brandy que se sobreponía a todo, haciendola realmente pesada. Quién cojones te manda pedir un coñá tu?? En otra situación igual hasta me gusta pero no pude con ella. Sólo nos quedaba tomar la vieja gafuda así que de perdíos al Támesis-siguiendo con el tema de las frases Gilipollas y pedimos dos pintas de Old Speckled Hen. Todo caramelo, parece que estemos tomando el postre dijimos casi a la vez. En resumidas cuentas, al final tuvo que caer una última GK IPA, para quitar el sabor dulce. De entre los tuertos.....

Y Así fue como en el primer día y 8 pintas después, nos ibamos a dormir, con la sensación de haber llegado a una ciudad que nos prometía muchas sensaciones... Haya Salud
* Buscando sobre ella vimos después que había ganado el premio en categoría Blonde ale en el Festival de este Año GBBF 2009
P.S.- Ostia olvidaba lo malo del Mayflower... por si váis y demás( que es lo que dice mi amigo jejejee)...Vaya por delante que merece la pena la visita, al menos en mi opinión, A parte de la cerveza que no me gustó y de no tener una Guest Ale, lo peor son los putos precios para comer, Es un sitio bastante caro. Aunque Entiendo que su situación privilegiada haya que pagarla, pero por ejemplo, para mí la comida tampoco es para tanto- el puto pollo, a pesar de estar cerca del río, estaba más seco que un polvorón de Estepa.Lo más recomendable para pedir allí es el Dish of the Day que ronda las 10 libras( lo que es caro también, no os creáis) y los light bites( bocadillos y sandwiches).